Conoce a John. John está buscando un nuevo trabajo. Cuando encuentra una oferta de trabajo que parece ideal para él, decide indagar un poco acerca de cómo funciona realmente la empresa.

Lo primero que hace es buscar en Facebook y Glassdoor. Y, a pesar de lo entusiasmado que está con el puesto, no lo está tanto con los comentarios que ve publicados en estos sitios.

Horario poco realista. Equipo directivo poco comprensivo. Sin posibilidades de crecimiento. Políticas de oficina tóxicas.

A pesar de las fotos de empleados felices disfrutando de un aperitivo en la página de "Acerca de nosotros", John ahora asume que la cultura de la empresa es todo lo contrario a lo que la compañía promueve. A raíz de esto, se olvida de esta oferta de trabajo y empieza a buscar algo mejor.

Si eres una empresa, posiblemente esta historia te escandalice. El hecho de que un candidato pueda depositar tanta confianza y otorgar tal valor a un comentario, que quizá podría haber publicado algún antiguo empleado molesto, inmediatamente invalida toda la dedicación y el trabajo duro que hayas invertido en la imagen de la empresa.

Pero puedes estar seguro de que esto ocurre con más frecuencia de lo que probablemente quieras admitir. Además, el hecho de que los aspirantes se fíen de esta información antes incluso de presentar su candidatura tiene graves consecuencias.

¿Qué importancia tiene la cultura realmente?

"En Glassdoor, la plataforma a la que la gran mayoría de los trabajadores de Norteamérica recurren para tomar decisiones laborales, la repercusión probablemente se sentirá con un duro golpe en la contratación y un aumento de la rotación de personal", explica Perry Petrozelli, Director general de Aventr, una empresa que fabrica varias aplicaciones para respaldar el compromiso de los empleados.

De hecho, la cultura empresarial es una inquietud importante para muchos candidatos, sobre todo para los de la generación millennial. Es más, el 80 % de los millennials consideran que la cultura empresarial y el equipo son los factores más importantes que hay que tener en cuenta para evaluar a las empresas, incluso por encima del potencial de promoción profesional.

Qué esperan los mileniales de las empresas

Fuente de la imagen

Si tu reputación online no se gestiona o mejora de forma activa, corres el riesgo de que cree una cultura empresarial en tu lugar.

"Cuando hay un comentario negativo, muchos suponen que lo ha hecho un antiguo empleado molesto para desahogarse", comenta Cara Silletto, que posee un Máster en Administración de Empresas y es Presidenta y Directora de retención en Crescendo Strategies, una empresa centrada en reducir la rotación de personal. "Cuando  varios comentarios de actuales o antiguos empleados empiezan a crear un patrón, esta es la imagen que transmitirás. Si no tienes intenciones de crear de forma proactiva la imagen empresarial que te gustaría dar, se formará poco a poco una no intencionada."

Según revela un estudio de Glassdoor, el 74 % de los usuarios son más propensos a solicitar un empleo si la empresa gestiona su imagen de forma activa.

"En el mercado laboral de hoy en día, los aspirantes y candidatos tienen el control", añade Silletto. "En cierta medida, esto se debe al acceso a información como los comentarios sobre las empresas que se publican en Internet".

¿Y si se trata de tu propio equipo? Un estudio revela que aquellos empleados que dan una baja puntuación a la cultura de su empresa son un 15 % más propensos a buscar un nuevo trabajo que sus compañeros.

Cómo promover una cultura empresarial positiva

Ahora ya sabes que crear una cultura empresarial dinámica es importante tanto para contratar a nuevos empleados como para retener a los existentes, independientemente de si te preocupan o no los comentarios negativos online. Pero eso no significa que el proceso sea sencillo.

Puedes estar seguro de que no eres el único que se siente así. Según una encuesta de Deloitte, el 87 % de las empresas destacan la cultura empresarial y el compromiso como uno de sus mayores desafíos. Puede que sea una tarea difícil, pero es posible siempre y cuando estés dispuesto a lo siguiente:

1. Aprende de lo malo

Es posible que te inclines por fruncir el ceño o burlarte la primera vez que leas un comentario negativo en Glassdoor o Facebook. Aunque esos sentimientos negativos son entendibles, realmente no sirven para nada. Lo que debes hacer en su lugar es examinar detalladamente los comentarios duros y sacar algunas conclusiones importantes.

Cultura de empresa: aprende de tus comentarios negativos en Internet

"De forma similar a como se hace en un equipo de fútbol, consideramos los sitios como Glassdoor como el vídeo de un partido para los equipos de recursos humanos y contratación, es decir, que revisamos lo que funciona, lo que impacta y lo que no, aprendemos de ello y actuamos en consecuencia", explica Katie Burke, Directora de recursos humanos en HubSpot.

"Las opiniones que los candidatos reflejan en Glassdoor, Facebook y otras redes sociales aportan información de un valor incalculable en relación con las cosas que podemos mejorar y las iniciativas que realmente funcionan", añade. "Creo que las empresas que ignoran esta importante información realmente están perdiendo la oportunidad de reflexionar, responder y mejorar".

Así que, coge un cuaderno y mira si puedes identificar las tendencias o los temas comunes que afloran en dichos comentarios. Esto te ayudará a centrarte en los ámbitos de tu cultura empresarial que más necesitas mejorar y perfilar, así como en lo que pueda perderse en la traducción.

2. Da prioridad a la cultura empresarial

Una cultura empresarial positiva es algo que no sucede por casualidad. Debes esforzarte por crearla. Debe ser una máxima prioridad para cada líder en tu empresa.

Lamentablemente, esto implica ser convincente.

"Uno de los errores que veo a las personas cometer una y otra vez es tratar de convencer al equipo de nivel C de que promueva la cultura empresarial solo porque es divertido", explica Burke en una entrada en el blog de Zenefits. "Tienes que crear un argumento comercial para la cultura empresarial. Explica por qué es importante para el negocio y demuestra qué relación guarda con los principales objetivos empresariales".

Como es natural, existen un sinfín de estadísticas que muestran de qué forma la cultura empresarial afecta a la contratación, la retención y el compromiso de los empleados. Así que, no vas a tener ningún problema para conseguir las pruebas y justificaciones necesarias.

Además, los jefes deben darse cuenta de que la cultura empresarial no tiene un final. "La cultura empresarial es un viaje, no un destino", explica Petrozelli. "Más bien, se trata de un organismo vivo que cambia a medida que las empresas innovan, se adaptan y crecen. No es tan sencillo como meter a los empleados en una sala para disfrutar de un barril de cerveza y jugar partidos de pimpón".

La cultura empresarial va a adquirir cada vez más importancia en el futuro. Descubre por qué en esta reveladora charla de TED Talk de Rainer Strack:

3. Fija objetivos reales

La cultura empresarial puede ser algo difícil de medir. No obstante, eso no significa que tengas que cruzar los dedos y esperar a ciegas a que tus esfuerzos tengan el impacto deseado.

En su lugar, Burke recomienda que fijes un objetivo mensurable al que puedas aspirar. Por ejemplo, aumentar los índices de retención en un porcentaje concreto. Puede ser que esto implique aumentar el número de candidatos para una vacante. O, tal vez, es algo tan sencillo como conseguir un número récord de asistencia a una quedada de empleados.

"Documenta todos estos objetivos y, después, basa las actividades destinadas a promover la cultura empresarial en conseguirlos", comenta en la misma entrada de Zenefits.

Supervisar estos objetivos te ayudará a averiguar si el trabajo que estás llevando a cabo se está amortizando o si, por el contrario, necesitas cambiar sus estrategias y enfoque.

4. Recopila comentarios

La transparencia es un ingrediente clave para una cultura empresarial positiva. Y si Glassdoor y Facebook son las únicas plataformas en las que los empleados pueden dar su opinión sobre cómo funciona tu cultura, entonces hay un problema.

"A medida que las empresas toman conciencia de la creciente demanda de la integración, los comentarios constantes y transparentes son cada vez más importantes", comenta Petrozelli.

Si bien puedes recopilar comentarios sobre una amplia variedad de aspectos relacionados con tu empresa, averiguar cómo se sienten tus empleados con la cultura empresarial te ayudará a comprender mejor lo que necesitas mejorar o modificar.

Usa encuestas para recopilar los comentarios de los empleados: promueve una cultura de empresa positiva

Muchas empresas utilizan las encuestas para identificar cuestiones y comentarios directamente relacionados con la cultura empresarial y la satisfacción general en el trabajo. Amazon, por ejemplo, presentó destacadas encuestas de satisfacción laboral diarias para sus empleados.

No necesitas hacer algo tan frecuente; en cambio, Hubspot realiza una encuesta trimestral. Sin embargo, realizar algún tipo de encuesta relacionada específicamente con la cultura de la empresa puede ayudarte a obtener una imagen más realista del impacto de la cultura empresarial en tus empleados y realizar todos los ajustes que resulten necesarios.

5. Céntrate en lo que realmente importa

La cultura empresarial se confunde fácilmente con las ventajas. Sin embargo, no es lo mismo. Las ventajas son un magnífico complemento de la cultura, pero no la representan al completo. Debes considerarlas como la guinda que corona la tarta, y no como la tarta en sí.

Entonces, ¿qué tipo de aspectos son más importantes en cuanto a la cultura? Las preferencias variarán de un empleado a otro, pero, a continuación, te indicamos algunos puntos clave que son significativos para la mayoría de la plantilla:

  • Desarrollo profesional y oportunidades de crecimiento
  • Recompensas y reconocimiento por un trabajo bien hecho
  • Alto nivel de transparencia e información
  • Tener propósitos y contribuir a la imagen general
  • Equipo directivo servicial y alentador

Cumplir todos estos importantes requisitos te aportará muchísimo más que tener un barista en la oficina y unas sillas cómodas.

Pero, espera... ¿debes responder a los comentarios negativos?

Todas las tácticas anteriores te pueden ayudar a crear una cultura más dinámica para tu empresa. Pero es probable que todavía tengas una buena pregunta por responder: ¿qué debes hacer con los comentarios negativos que ya circulan por tus perfiles de Glassdoor y Facebook? ¿Debes ignorarlos? ¿Tienes que responder?

Cultura de empresa: ¿debes responder a los comentarios negativos publicados en Glassdoor o Facebook?

Para ser honestos, la respuesta es que depende.

En ciertos casos, puede ser útil abordar la inquietud que se plantea en dicho comentario, pero siempre y cuando respondas de forma educada, profesional y colaborativa. Si respondes a los comentarios sobre tu organización (sí, incluso a los dañinos), puedes demostrar que te preocupas de forma activa por la reputación y la imagen de la empresa.

Da un paso más allá y pasa a la acción cuando se trate de tener muy en cuenta cada palabra del comentario, ya sea positivo o negativo.

Pero, ¿qué sucede si el comentario es totalmente infundado o solo se reducirá a un intercambio emocional? Es mejor que te quedes callado. "Librar la batalla del comentario en Internet no es la respuesta", advierte Silletto.

Depende de ti

Los comentarios negativos en redes sociales son suficiente como para querer apretar los puños y los dientes. Sin embargo, antes de publicar esa respuesta sarcástica, tienes que llegar a la raíz del problema: la cultura de tu empresa.

Probablemente debes gestionar de forma proactiva tu propia cultura, antes de que las redes sociales creen una por ti.

Convirtiendo tu cultura en una prioridad, podrás realizar importantes ajustes que harán más felices a tus empleados, mejorarán la retención y reforzarán mucho más la contratación. En última instancia, esos esfuerzos más serios te llevarán mucho más allá que un comentario borde sobre una reclamación infundada de un comentario.

"Si pintas un coche cutre, quedará reluciente, pero seguirá siendo cutre", concluye Silletto.